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CÚCUTA.- El comienzo del tiempo de cuaresma tiene dos momentos especiales para los católicos cucuteños. El primero es la imposición de la ceniza con la mensaje “recuerda que polvo eres y en polvo te has de convertir”. El segundo es el inicio de la Campaña de Comunicación Cristiana de Bienes, que este año beneficiará a internos del Centro Carcelario y Penitenciario de Cúcuta.
El padre Carlos Alberto, vestido de sotana negra, sorprendió a los cucuteños que merodeaban por el parque Santander. En sacerdote impuso la ceniza a los transeúntes y les entregó el mensaje de la Iglesia para este tiempo de cuaresma. Hombres y mujeres, niños y adultos, aceptaron la invitación y limpiaron la frente para que les estamparan la cruz.
Las cenizas se elaboran a partir de la quema de ramas de olivo del Domingo de Ramos del año anterior, siendo luego bendecidas. Representa la destrucción de los errores del año anterior, al ser quemados. El Miércoles de Ceniza marca el inicio de 40 días de gracia y misericordia que invitan a la oración, la conversión y la solidaridad.
Al paso del padre Carlos Alberto lo creyentes detenían el caminar y luego de recibir el símbolo del perdón elevaban una corta oración en señal de arrepentimiento. Desde los vehículos, conductores y pasajeros solicitaron al ministro católico la imposición de la ceniza para evitar no participar de este rito.
La Diócesis de Cúcuta adelanta la Campaña de Bienes como “un ejercicio de Cuaresma que responde a una realidad sentida, una realidad humana, que nos llama a ser misericordiosos como lo dice el Evangelio: ‘misericordia quiero y no sacrificios’”, explicó el padre Abimael Bacca, director de la Pastoral Social de la Diócesis.
En la Cuaresma, como fruto de los ayunos y las privaciones, se fortalecerá y ampliará la presencia de la Iglesia en los centros de reclusión de la ciudad. La campaña responderá a una de las Obras de Misericordia: ‘Estuve en la cárcel y vinieron a verme… Les aseguro que todo lo que hicieron por uno de estos hermanos míos más humildes, por mí mismo lo hicieron” (Mateo 25, 36 – 40).
Los recursos recaudados en estos 40 días se invertirán en la adecuación de dos centros de pastoral penitenciaria católica. Esos espacios estarán al servicio de la acción pastoral y evangelizadora de internos, familiares, personal administrativo y guardias.
“Hoy más que nunca es indispensable hacer realidad la reconciliación y la paz, no solo hablando de la prisión como un lugar permanente de conflictos, sino como un lugar propicio para llenarlo de la gracia de Dios”, dijo el padre Rhonald Sttyd Suárez, delegado de la Pastoral Penitenciaria Católica de Cúcuta.
‘Conociendo el rostro de Jesús tras las rejas’ es lema de la Campaña que se adelantará en las parroquias de la Diócesis de Cúcuta, instituciones educativas, fundaciones y establecimientos de comercio. El complejo Carcelario y Penitenciario de Cúcuta cuenta con 4062 internos (hombres: 2885 zona norte y 836 zona sur; mujeres: 341).
La iniciativa, en el Año Santo de la Misericordia, hace un llamado a los bautizados a solidarizarse con los internos, comprendiendo que en ellos está el rostro misericordioso de Cristo.
“En la Cuaresma, como fruto de nuestros ayunos y privaciones, queremos en la Diócesis de Cúcuta, fortalecer y ampliar la presencia de la Iglesia Católica en los centros de reclusión de la ciudad”, dijo monseñor Víctor Manuel Ochoa Cadavid.
“Detrás de las rejas hay unos rostros humanos de sufrimiento, de esperanza y de libertad, que reflejan el dolor de Cristo, el amor misericordioso de Dios”, agregó el padre Abimael Bacca. Serán 40 días para la solidaridad, para que las prácticas cuaresmales de la oración, la penitencia y la ofrenda, renueven nuestra vida, contribuyendo así a una mejor sociedad.
Los funcionarios de la administración departamental le dieron la bienvenida a la Cuaresma con la imposición de la ceniza en la frente, como símbolo de la fe cristiana y católica que profesan los pueblos. El sacerdote Jesús Uriel Cristancho, de la Diócesis de Cúcuta, presidió la ceremonia.
“Nos separan 40 días hasta la celebración del Triduo Pascual, que significan la pasión, la muerte y la resurrección de Jesucristo. Los cristianos católicos acudimos al templo como símbolo de la reconciliación”, expresó en la homilía.
Foto: www.contraluzcucuta.co
