CÚCUTA.- Herrán, Ragonvalia, Santiago y Labateca presentan fallas geológicas inminentes y en cualquier momento pueden poner en riesgo la vida de los habitantes. La situación de estos municipios afana al gobierno departamental al recordar lo ocurrido en Gramalote, en diciembre del 2010.
En mayo, el gobernador Edgar Díaz solicitó al Servicio Geológico Colombiano (SGC) el envío de expertos para analizar lo ocurrido y conocer el concepto técnico sobre lo que pueda suceder en los cuatro pueblos de Norte de Santander.
Hasta el momento no ha habido respuesta del organismo nacional, a pesar del llamado de urgencia planteado por las consecuencias que genera el desprendimiento del suelo. En los últimos años se hecho la advertencia al Gobierno en busca de ayuda.
Desde Bogotá no se han conocido declaraciones, a pesar de que la falla geológica amenaza con destruir a Herrán, donde ha averiado varias construcciones del casco urbano. Las grietas se observan en el nuevo colegio Perpetuo Socorro, en la vereda El Llano, donde se tenía pensado refundar el municipio.
Hace 40 años, el pueblo se ha enfrentado al desacierto, la angustia y la inestabilidad del terreno. La falla geológica, con el pasar del tiempo y con la pasada oleada invernal, acentuó los problemas.
La Gobernación adelanta trabajos en las vías terciarias yla UnidadNacionalde Gestión del Riesgo apoya con el préstamo de maquinaria para la remoción de derrumbes.
El gobierno departamental, en cumplimiento de directrices trazadas porla Ley1523 del 2012, no puede hacer inversiones significativas, ni promover sitios de alto riesgo. Por el contrario, adelanta obras de mitigación.