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El más ilustre hijo de la lucha libre mexicana llega a la memoria de los seguidores al cumplirse el 99 aniversario del nacimiento. Los homenajes sirvieron para recordar a este hombre que luchó contra la maldad y la injusticia, y enfrentó personajes terroríficos en el ring, las historietas y las películas. Hoy, lo encontramos en una de las muchas páginas en las que internet muestra su vida y obra.
¿Nombres?
Rodolfo Guzmán Huerta.
¿Apodo?
El Santo.
¿Significado?
Represento la justicia y la lucha contra el mal.
¿Lugar y fecha de nacimiento?
Tulancingo, Hidalgo (México), 23 de setiembre de 1917
¿Cómo está formada su familia?
En 1940, me casé con María de los Ángeles Rodríguez Montaño (Maruca). Tuvimos diez hijos: Alejandro, María de los Ángeles, Héctor Rodolfo, Blanca Lilia, Víctor Manuel, Miguel Ángel, Silvia Yolanda, María de Lourdes, Mercedes y Jorge Guzmán Rodríguez (El Hijo del Santo).
¿Personalidad?
Luchador mexicano enmascarado.
¿Qué hacía antes de ser luchador?
Trabajaba como obrero en una fábrica textil.
¿Característica?
Uno de los primeros exponentes en utilizar máscara. Estrella en los cuadriláteros de lucha libre durante casi cinco décadas.
¿Por qué su legado carece de precedentes?
Soy considerado un ‘antepasado’ de la lucha libre y uno de los primeros súper héroes enmascarados en Estados Unidos.
¿En México cómo lo consideraban?
Como el único al que nunca podían derrotar las fuerzas mal en los cuadriláteros, historietas o películas en las que participé.
¿Cómo se preparó para este oficio?
Aprendí jiujitsu (arte marcial japonés clásico) y lucha grecorromana, en la década de 1920.
¿Cuándo debutó como luchador?
En 1935 y peleé bajo diferentes nombres: Rudy Guzmán, El Hombre Rojo, El Enmascarado, El Incógnito, El Demonio Negro y El Murciélago Enmascarado II.
¿En qué momento se convierte en El Santo?
En 1942, adopté la máscara plateada. Mi habilidad para la lucha libre me llevó a protagonizar mi historieta ‘Santo, el Enmascarado de Plata’. La publicación era semanal.
¿Cómo entró al cine?
En 1958, empecé a participar en largometrajes. Tengo acreditadas 52 producciones.
¿Recuerda algunas películas?
Lógico, todas. Estas son algunas: Santo contra cerebro del mal; Santo contra los hombres infernales, Santo contra los zombis, Santo contra el Rey del Crimen, Santo en el hotel de la muerte, Santo contra el cerebro diabólico; Santo contra las mujeres vampiro y Santo en el museo de cera.
¿Contra qué otros enemigos luchó?
Contra el estrangulador, el espectro, los marcianos, los villanos del ring, Drácula, Capulina, Blue Demon, los monstruos, los muertos, los cazadores de cabezas, los jinetes del terror, la mafia del vicio, las momias de Guanajuato, los asesinos de otros mundos, el águila real, la hija de Frankenstein, la magia negra, el hombre lobo, los secuestradores, las lobas, el doctor Muerte, La Llorona, el Servidor Asesino y el asesino de la televisión.
¿Cuántas veces perdió la máscara en una pelea?
Ninguna.
¿Cuántas veces se quitó la máscara?
Nunca. Incluso ni para comer. La máscara solo dejaba descubiertos el mentón y la boca. Hice de todo para proteger mi identidad, hasta en aeropuertos.
¿Cuándo mostró el rostro?
Ocurrió en el programa de televisión mexicano ‘Contrapunto’. Hizo parte del espectáculo.
¿Sucedió a manera de despedida de su gente?
Pues sí. Pasó una semana antes de mi fallecimiento.
¿Cómo murió?
El 5 de febrero de 1984, sufrí un infarto de miocardio, después de una actuación en el Teatro Blanquita. No fue el primero, pero sí el último infarto.
Los mexicanos lo lloraron…
Imagínese, 10.000 seguidores fueron a Mausoleos del Ángel. En mi ciudad natal me levantaron una estatua
¿Cómo pidió ser enterrado?
Con la máscara puesta, para corroborar lo que un día le dije a Chespirito, “ésa es la inobjetable realidad: sin la máscara no somos nadie”.
Adaptado de:
https://es.wikipedia.org/wiki/El_Santo
RAFAEL ANTONIO PABÓN
rafaelpabon58@hotmail.com
Foto: http://www.infobae.com/
