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CÚCUTA.- A veces, editar y publicar textos se torna en una empresa inalcanzable. Llegar a las editoriales grandes y hacer parte del catálogo de esas firmas que exhiben los productos literarios en librerías o estantes de almacenes de cadena, es una ilusión que se desvanece por el camino. Incluso, el intentarlo no es suficiente para lograr el objetivo.
Estos tropiezos, analizados con la calma que da la sicología, más la necesidad de publicar y editar textos propios, llevaron al pamplonés Camilo Prada a darle vida a la editorial La Horca, con carácter de independiente y emergente. El surgimiento ocurrió en el 2022, como plataforma para divulgar arte y textos poéticos y literarios.
- Producimos carteles, buscamos recuperar la historia del arte por medio de los artículos artísticos que vendemos. Los carteles, algunos, tienen que ver con películas del cine clásico, mudo y negro. Buscamos visibilizar poetas fallecidos, de antaño, y hacemos publicaciones de revistas pequeñas para que estén al alcance de cualquier persona.
Este sicólogo y su pareja Leilani Quintero, con ganadas experiencias en técnicas artísticas, se abocaron a la creación de imágenes y de contenido gráfico para divulgar y vender. La primera que exhibieron en un estand fue en el mercadillo Cíngaro, del programa de artes visuales de la Universidad de Pamplona. Ahora, llegaron a la Fiesta del Libro de Cúcuta y mostraron qué son capaces de hacer.
También, juegan con la ironía y el cinismo, para lograr productos en los que resalta la jocosidad. Uno de los cuadros expuestos está inspirado en el amor. La pareja que lo adorna son los asaltabancos gringos Bonnie Parker y Clyde Barrow, amantes que se adoraban. El hombre escribía poesía. La curiosa relación llevó a los autores pamploneses a resaltar la historia.
Entre las producciones propias está el cuadro Visión de túnel, una chica mira a través del túnel negro. La imagen se centra en un círculo, lo que permite el juego con las técnicas mixtas. Está elaborado en pastel sobre cartulina y el vidrio está intervenido con pintura de vitral.
- Hay otros en acuarela, con dibujo, con intervención en el cristal. Nos gusta generar piezas únicas, que no sean repetidas. Ninguno de los cuadros se encuentra en internet. Todos los producimos nosotros.
En el mostrario hay un cartel inspirado en una obra de arte de mediados del siglo XIX, de Edgar Degas, pintor francés y maestro del pastel. Matando el tiempo, es un collage análogo, elaborado sobre un escáner. La imagen nunca se creó en físico. Eva, está inspirado en la gata de Camilo. Mujer en el lago, es una joven que emerge del agua profunda, inspirada en el expresionismo nórdico. El cuervo, recuerda el poema de Edgar Allan Poe, y grita ‘humano maldito’.
Otra variedad del trabajo de estos artistas está direccionada a las confecciones, especialmente de bolsos. Son mochilas que han ganado presencia en el público, elaborados en tela sencilla y con materiales simples. Los traídos a Cúcuta están hechos en lona costeña, que es ecoamigable y resistente.
Están estampados. La serigrafía con tintas es ciento por ciento casera. Los bordados y cosidos son a mano. En esta labor cuentan con apoyo familiar. Tienen como marca Nada.
- Es mi seudónimo poético. Firmo como Nada. En algún momento mi pareja (Leilani) me regaló un parchecito bordado y ella escribió Nada. Me gustó la imagen y la digitalicé. A la gente le ha parecido curioso.
RAFAEL ANTONIO PABÓN
