CÚCUTA.- El 99,99 por ciento de los usuarios de créditos en Ifinorte ha cumplido con los pagos. Así lo expresó el gerente del instituto César Rojas al entregar otros recursos a microempresarios cucuteños. Los beneficiados recibieron entre $ 500.000 y $ 4,0 millones.
“Eso nos llena de satisfacción, porque esos recursos se rotan y se vuelven a prestar”, dijo el funcionario. Los beneficiados son los mismos microempresarios y otros que quieran los créditos. “Ifinorte busca no perder, no busca ganacia”.
Los créditos otorgados pretenden que quienes los reciben se encaminen por un negocio. Corfas es el aliado estratégico ideal para desarrollar este programa, en el que la Gobernación está interesada. El plan consiste en prestar los recursos a bajos intereses para incentivar la vocación que tienen las comunidades.
“Hemos encontrado un aliado estratégico para trabajar con estas personas”, dijo César Rojas al presentar a Corfas. Hay usuarios que trabajan hace 14 años con la corporación. “Eso lo llena a uno de satisfacción y más en este momento difícil que vive la ciudad”.
Muchas veces, los ciudadanos esperan que les se tienda una mano para seguir adelante y subsistir, a pesar de los problemas que ocurren en la ciudad por el desempleo.
“Este es un granito de arena que aporta Ifinorte para que Corfas, que es un operador serio en el país, les dé los recursos”, dijo el gerente. La corporación distribuye el dinero a medida que se cumplen los plazos. Los pagarés que firman con Ifinorte los beneficiados también están al día.
En El Zulia, recientemente, se destinaron $ 500 millones para el trasporte público para aquellos que tocaron las entidades financieras y no encontraron apoyo. “Los estamos ayudando dándoles a dos empresas de 27 socios cada una”, anotó César Rojas.
El deseo es que haya una oportunidad laboral en la ciudad, por cuanto nadie presta y cuando lo hace pone ‘el cuenta gota’. “A estos programas tiene que vincularse la Alcaldía de Cúcuta para fortalecerlo”. La ciudad necesita alternativas para los empresarios, los microempresarios y los que tienen un microcrédito para que el Estado ayude a buscar salidas hacia el interior y el exterior.
“Las oportunidades laborales las hay, pero hay que buscar otros espacios. Cúcuta no alcanza a consumir lo que se produce en las microempresas. Cuando hay trabajo habrá dinero”, dijo Rojas Ayala.
Foto. MARCO SÚA