CÚCUTA.- El Cúcuta Deportivo está sumido en la más honda crisis que tiende a agravarse día a día, escribió César Fernández Elcure en la carta de renuncia que presentó a la directiva, este martes, y explicó que esa situación negativa más que deportiva es fundamentalmente administrativa y financiera. El club arrastra un pasivo contable, a 30 de septiembre, que asciende a $16.003 millones.
Ante la dimisión del presidente, el primer vicepresidente de la Corporación Nuevo Cúcuta Deportivo, Wilmer Buitrago, quedó encargado de la institución rojinegra hasta, el 8 de noviembre, cuando se cumpla la asamblea general extraordinaria y se elijan los nuevos dignatarios de la junta directiva.
Fernández Elcure pasó pocos días al frente del club y tomó la decisión de retirarse porque no se le dieron las condiciones administrativas para seguir en el cargo.
El 25 de octubre, habrá asamblea para analizar con los asociados de la Corporación la parte financiera del equipo. La directiva sigue integrada por Wilmer Buitrago, Álvaro Torrado, César Fernández El cure, Iván Abreo Monsalve y Pedro Barriga.
CARTA DE RENUNCIA
El siguiente es el texto de la carta presentada por César Fernández:
“En desarrollo de la reunión de Junta Directiva No 13 del día 7 de octubre del presente año tuvieron a bien postularme y elegirme como Presidente de la Corporación, ante la reiterada solicitud de renuncia del Señor Álvaro Torrado Sagra, el cual acepté condicionadamente en el ánimo de desarrollar algunas acciones concretas que contribuyeran al saneamiento y crecimiento de la entidad, tales como el impulso al proceso de conversión de la Corporación Nuevo Cúcuta Deportivo en sociedad anónima, así como el de tramitar y obtener algunos recursos ampliamente prometidos que nos permitirían levantar los embargos judiciales y así recaudar oportuna y directamente los estimativos que deben soportar el funcionamiento de la institución.
“En ese orden de ideas realicé amplias reuniones con integrantes de la Junta Directiva, técnicos, jugadores y personal administrativo con el fin de obtener una radiografía integral, que no fuera simplemente mediática sino que cubriera la realidad de la institución.
“Salvo el adelantamiento de los pasos que me correspondió efectuar en relación con la transformación jurídica a sociedad anónima, los cuales quedan definidos con la expedición de la resolución que así lo dispone y la publicación a convocatoria para el próximo 8 de noviembre a Asamblea General para el estudio de los estatutos, elección de dignatarios y autoridades deportivas internas, ha sido frustrante conocer que los recursos prometidos por una u otra razón no fueron cumplidos dejando al Cúcuta Deportivo sumido en la más honda crisis que tiende a agravarse día a día, a la que hay que enfrentar con radicales medidas de choque, que requieren la participación y apoyo de amplios sectores en orden a establecer las bases que permitan definir planificadamente acciones a corto, mediano y largo plazo.
Dado que no se dieron las condiciones sobre las cuales sentaba mi ejercicio y el resultado del análisis financiero hecho conforme a balance general, estado de resultados y balance de comprobación que reflejan un pasivo contable a 30 de septiembre de 2011 que asciende $16.003’060.000, conforme se observa en el anexo de esta comunicación, me obligan a presentar renuncia del cargo de Presidente, con el fin de que colectivamente podamos explorar medidas y alternativas administrativas, financieras y deportivas que deben partir de una gestión ante la Dimayor para obtener a título de anticipo sobre los derechos de televisión cerrada y abierta, así como de los derechos por venta y préstamos de jugadores sobre la vigencia 2012 los recursos inmediatos que nos permitan la cancelación de los pasivos laborales y los embargos de la DIAN y el Hincha Fiel primordialmente.
“Un segundo paso a seguir sería la convocatoria inmediata de todos los acreedores para convenir voluntariamente un plan de pagos y una revisión de estados de cuenta de los aportes de los patrocinadores y establecimiento de una nueva modalidad de contraprestación respecto de la entrega de los pases de cortesía, que se han convertido en un amplio negocio por parte de algunas personas con perjuicio de los intereses económicos del Cúcuta Deportivo.
Debemos admitir que la crisis del Cúcuta Deportivo más que deportiva es fundamentalmente administrativa y financiera, ya que nada ganaríamos en mantener mediáticamente unos resultados que arreglan el alma deportiva pero que no solucionan la raíz de los problemas. Una tercera acción de orden inmediato seria la reducción temporal de gastos administrativos.
“Si estas medidas se hacen efectivas llegaremos a la fecha de transformación de la Corporación a Sociedad anónima, con un panorama más despejado que será aliviado por los rendimientos derivados de la conversión de títulos en acciones. Es innegable así mismo, que la nueva modalidad jurídica de la institución permitirá total transparencia en el ejercicio administrativo y financiero que será un aliciente para nuevos socios, que vendrán a fortalecer la nueva sociedad.
“Entenderán las razones que tengo para tomar esta decisión que conlleva más que una simple renuncia, una invitación a la reflexión abierta y desinteresada por parte de todos los protagonistas de una causa”.