La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) reconoció a ‘Suelos y Tierras de Colombia’, como la obra que más contribuyó con el manejo sostenible del recurso suelo en el 2016. El director general del Igac, Juan Antonio Nieto, recibió el premio en Roma (Italia), en el Día Mundial del Suelo.
El instituto cosecha triunfos y reconocimientos por la experiencia en el manejo y estudio de los suelos y tierras colombianas. La publicación ‘Suelos y Tierras de Colombia’ compila datos, hallazgos y estudios generados por el Igac en los últimos 70 años. Ahora, ostenta el título como mejor trabajo ambiental en Colombia en el 2016, otorgado por la Fundación Alejandro Ángel Escobar.
La publicación traspasó fronteras y fue reconocida por la FAO con el Premio Mundial del Suelo Glinka 2016, lo que la convierte en la obra más relevante en el mundo sobre este olvidado, pero básico recurso natural.
Este reconocimiento internacional fue entregado en la conmemoración del Día Mundial del Suelo por José Graziano da Silva, director deneral de la FAO. Indicó que luego de una ardua evaluación de las nominaciones, el comité seleccionó a la obra del Igac como la que más contribuye al manejo sostenible del suelo en el mundo.
El premio, cuyo nombre honra al investigador ruso Konstantin Glinka, tiene como objetivo mantener el impulso alcanzado por el Año Internacional de los Suelos y hacer visibles las mejores iniciativas que buscan afrontar los problemas nacionales de degradación del suelo. Además, “incentivar a los profesionales a que contribuyan con la preservación del medio ambiente, la seguridad alimentaria y la mitigación de la pobreza”.
El riguroso trabajo de investigación fue elaborado por más de 18 expertos. “Este nuevo reconocimiento no podría haber llegado en un mejor momento”, dijo Nieto Escalante. Pone al Igac como protagonista para llevar las acciones contenidas en la Reforma Rural Integral, que contribuirá a:
1.- La trasformación estructural del campo
2.- Generar condiciones de bienestar y buen vivir a la población
3.- Integrar las regiones para erradicar la pobreza, promover la igualdad y asegurar el disfrute de los ciudadanos.
La trasformación del campo colombiano requerirá de la adopción de medidas para promover el uso adecuado de la tierra de acuerdo con la vocación y estimular la formalización, restitución y distribución equitativa, retos que se sustentan en el trabajo adelantado por el Igac.
La información será fundamental para la creación del Fondo de Tierras, que dispondrá de tres millones de hectáreas para distribuirlas gratuitamente. Aportará para cumplir con la formalización de siete millones de hectáreas de pequeña y mediana propiedad rural; la erradicación del 50 por ciento de la pobreza rural; evitar la inequidad en la concentración de la tierra; el Sistema General de Información Catastral, Integral y Multipropósito; y el Plan de Zonificación Ambiental para delimitar la frontera agrícola y proteger los ecosistemas frágiles.
“Colombia aún no dimensiona la necesidad de proteger y hacer un uso adecuado de este recurso. A pesar de ser un territorio con una gran diversidad de suelos, en los cuales se pueden realizar tanto actividades productivas como de conservación, hemos desaprovechado nuestro potencial agrícola, extralimitado la ganadería y afectado los ecosistemas estratégicos. Esto se debe a que no hacemos un uso de la información, la cual indica detalladamente las zonas aptas para usos agrícolas, pecuarios, forestales y de protección”, dijo Juan Antonio Nieto.
Foto: PRENSA IGAC