Las razones de un escritor no solo deben estar encaminadas a hacer arte y a mostrar el talento y la elocuencia al plasmar sus creaciones. Un escritor es un dios, debe apreciar esa capacidad que tiene para crear la vida literaria, tiene el poder y la capacidad para dirigir el rumbo o destino de lo que acontece con la historia.
Una historia es un mundo que se ha creado en el cerebro y que lo plasmamos en el papel para que por medio de la lectura las personas tengan la capacidad de apreciar estos mundos y, claro está, guardar las creaciones para apreciar lo que podemos llegar a hacer. Estas creaciones, el escribir, cualquiera lo puede hacer, pero no cualquiera puede encaminarlas a convertirlas en un mundo organizado, con sentido de algo que podría ser desordenado y sin sentido.
Ahora bien, los protagonistas de la historia pueden, o no, tener de cierta manera moral y espíritu. ¿Quién sostiene que esto no es vida? La vida está creada en nuestra mente una vez tenemos la creación literaria, sea en los impulsos neuronales o plasmada en el papel ¿Estás seguro de que lo que hablas con otros no es un monólogo? o ¿Quién te prueba que no somos un libro de un gran escritor que se lee una y otra vez? Debes saber que los viajes en el tiempo son posibles.
La escritura que como concepto es simplemente un sistema de representación gráfica de una lengua, no tiene nada que ver con la creación de mundos literarios. Esa diferencia debe ser marcada radicalmente aunque esté estrechamente relacionada entre sí. Escribir no es solo un arte, escribir implica ser un dios.
Cuando produzco una creación literaria me emociono. Se me despiertan sensaciones que pocas veces llego a sentir. Controlo todo. Hago lo que quiero que suceda y dirijo la historia a mi modo estando feliz, porque sucede lo que quiero que suceda.
Las barreras que tenía el ser humano para ser dios han logrado ser traspasadas. No me pueden negar que soy un dios, aunque en realidad dichas barreras nunca han existido. Decido que existan o no y he decidido dejarlas…
Soy un ser humano, soy un escritor, soy un dios que puede crear vida de cualquier tipo, inclusive, la puedo crear rompiendo las leyes de la física. ¿Quién dice que soy un insignificante humano?
Pedro Mora Villamizar
Estudiante de 11 grado