CÚCUTA.- A pesar de las medidas extremas y de los operativos especiales para evitar la quema de pólvora por parte de los niños cucuteños, en muchas calles de la ciudad se vieron pequeños disfrutando con artefactos explosivos y chispitas.
El alcalde Donamaris Ramírez dirigió las acciones la noche del 31 de diciembre y la madrugada del primero. En el recorrido se incautaron 200 muñecos con pólvora.
En varios barrios los ciudadanos desobedecieron las órdenes y mantuvieron la tradición de hacer estallar, a las 12:00 de la noche, los añoviejos para anunciar la llegada del nuevo año.
Dos niños de 7 y 13 años se quemaron tres dedos de las manos. Este hecho empañó la celebración. Los padres de familia tendrán que responder y asumir las consecuencias de esos actos que podrían marcar para siempre a los pequeños.
El alcalde Ramírez demandó ante la Fiscalía a los cuatro padres de familia por permitir que los hijos jugaran con pólvora y resultaran quemados en los primeros días de diciembre.
Cafesalud y Solsalud serán demandados por no prestaron atención médica y hospitalaria a los dos niños quemados. Los pequeños tuvieron que ser trasladados a una clínica privada. “No podemos permitir que entidades que le cobran al Estado no presten como es debido la atención y obliguen a los pacientes a hacer un recorrido de muerte”, precisó.
El balance oficial es el siguiente:
1.- En materia de accidentes solo se reportó un caso.
2.- No hubo homicidios en las fiestas del 24 y del 31 de diciembre.
3.- Incautados 960 kilos de pólvora
4.- Decomisados 200 muñecos de año viejo
5.- Se expidieron 31 comparendos por embriaguez
6.- Se inmovilizaron 31 vehículos
7.- Se reportaron 164 casos de riñas.
8.- Se limpió la ciudad.