CÚCUTA.- Aunque parezca “un tema recurrente o gastado”, hablar de la paz es fundamental, dijo monseñor Víctor Manuel Ochoa al dar inicio a la Semana por la paz. “Son muchos los hechos, momentos de dolor y sufrimiento que vive el país”, agregó.
Explicó que es urgente vivir esta Semana, que se ha preparado del magisterio del papa Francisco, homilías y mensajes dedicados al pueblo colombiano en la visita del 2017. “La paz es un asunto inaplazable, por el cual, la Iglesia en Colombia ha querido articular con contenidos diversos”.
La versión 33 de la Semana por la Paz irá hasta el 13 de septiembre. Desde 1987, se consolidó luego de evidenciarse múltiples acciones en el proyecto Programa por la Paz de la Compañía de Jesús y otras tantas movilizaciones de la sociedad civil para superar las consecuencias del conflicto armado.
A raíz de esos hechos se hizo necesario establecer una propuesta concreta, con alto impacto ciudadano que integrara instituciones, organizaciones, movimientos, universidades, ONG y redes que identifiquen la pluralidad religiosa, social, étnica, cultural, económica y política.
En ese momento se decidió que se haría cada primera semana de septiembre, para que coincidiera con el 9 de septiembre, Día de los Derechos Humanos en el país y de San Pedro Claver, sacerdote español defensor de la población afrodescendiente y esclavos.
En el 2020, se vivirá desde la virtualidad, con el propósito de visibilizar el compromiso de quienes trabajan en la consolidación de la paz. La Diócesis de Cúcuta propuso desde el contexto propio, acciones que promuevan la cultura del encuentro y caminar juntos hacia la paz y la reconciliación. Norte de Santander es una región con múltiples adversidades, a la que se añade la pandemia. Son realidades complejas, ante lo que la Iglesia Católica insiste en el valor de la vida humana.
La paz no es un tema gastado
El Obispo de Cúcuta explicó que promocionar la paz no es algo propio, porque hace medio siglo se celebra la Jornada Mundial de la Paz cada 1 de enero. El Papa entrega un mensaje sobre temas precisos para que los gobernantes del mundo y la Iglesia reflexionen y ejecuten acciones.
Norte de Santander vive una crisis dentro de la crisis
En Colombia la violencia se ha recrudecido en los últimos meses. Cada región afronta crueles realidades y Norte de Santander es una de las más afligidas.
Monseñor Víctor Manuel lamentó este “momento dramático”, resaltó el asesinato de líderes sociales, las masacres en Caño Indio (Tibú), Palmarito (corregimiento entre Puerto Santander y El Zulia), Banco de Arena (Puerto Santander), El Totumo (Pamplona) y Ábrego. También, los asesinatos en Cúcuta y el Área Metropolitana.
En cuanto a los fenómenos dentro del área urbana están la explotación de personas, prostitución, drogadicción, llegada masiva de desplazados y migrantes. Ante este panorama, monseñor Ochoa expresó que en Norte de Santander se vive “una crisis dentro de la crisis”.
La Diócesis de Cúcuta ha enfocado esta Semana en los siguientes territorios:
1.- Territorio con legalidad: Demos el paso hacia la honestidad, el reencuentro es con la paz.
2.- Territorio de acogida: Demos el paso hacia la dignificación de las personas, el reencuentro es con la paz.
3.- Territorio de vida: Demos el paso hacia la dignificación de las personas, el reencuentro es con la paz.
4.- Territorio ecológico: Demos el paso hacia el cuidado de la casa común, el reencuentro es con la paz.
5.- Territorio de reconciliación: Demos el paso hacia la dignificación de las personas, el reencuentro es con la paz.
En la presentación oficial de la Semana por la Paz participaron monseñor Víctor Manuel Ochoa, Obispo de Cúcuta; monseñor Héctor Fabio Henao, director de la Pastoral Social – Cáritas Colombiana; sacerdote Abimael Bacca, director de la Corporación de Servicio Pastoral Social (Cospas), y Paola Andrea Correa, profesional socio-jurídico Subsidio Local Cospas – GIZ.