CÚCUTA.- A pesar de los esfuerzos el Gobierno, la situación de violencia social y política en El Catatumbo, Área Metropolitana de Cúcuta y otras del país, además de compleja, sigue siendo difícil. Así se lo hace saber Wilfredo Cañizares, director de la Fundación Progresar, al presidente Gustavo Petro. En la comunicación, le reitera la necesidad de llevar a cabo reunión extraordinaria, que espera sea definida pronto.
Cauca, Nariño, Sucre, Bolívar, Casanare, Antioquia, Chocó, Valle del Cauca, Arauca, Magdalena Medio, Costa Pacífica Nariñense y Putumayo son otras regiones colombianas que afrontan dificultades por la violencia que las azota.
“Hace 60 días… le enviamos una carta solicitando una reunión urgente dada la situación de crisis humanitaria y de derechos humanos que vivimos en la mayoría de los territorios”, le recordó Cañizares a Petro. “La violencia y el conflicto armado no han dejado de golpearnos, principalmente a través de ataques a los liderazgos sociales, producto de la expansión y fortalecimiento de estructuras criminales en varias regiones de la geografía nacional”.
El vocero de Progresar señaló que desde el 2009, impulsan el proceso nacional de garantías para la defensa de los derechos humanos en el país, “consolidado como un espacio de interlocución de alto nivel entre el Estado y la sociedad civil”. En este empeño se cuenta con acompañamiento de la comunidad internacional.
En las regiones señaladas, dijo Cañizares, continúan los homicidios, masacres, reclutamiento forzado de niños y adolescentes, amenazas, violencia sexual, secuestros, confinamientos y desplazamiento forzado, sumado al control social de los grupos ilegales.
“En algunas zonas se siguen presentando connivencias entre fuerza Pública y actores armados, entre ellos, el grupo paramilitar Clan del Golfo- AGC y otras estructuras armadas”, concluye la comunicación.