CÚCUTA.- Los presidentes de Colombia, Juan Manuel Santos, y de Venezuela, Hugo Chávez, se encontrarán en el puente internacional Simón Bolívar, el jueves. La reunión se tomará como el relanzamiento de las relaciones bilaterales.
Eduardo Santos, Julio César Turbay y Virgilio Barco han cumplido citas similares con sus homólogos venezolanos, en eta zona de frontera.
El alcalde Donamaris Ramírez aprovechó el encuentro de los ministros de Defensa, días atrás, para hablar de la reunión presidencial con el Cónsul de Venezuela en Cúcuta, Sergio Ramón Arias Cárdenas; el embajador de Venezuela en Bogotá, Iván Rincón Urdaneta; los ministros del Interior y de Justicia de Venezuela, Tarek El Aissami, el general en jefe Henry Rangel Silva.
Las gestiones han sido informadas y reconocidas por el Ministerio de Relaciones Exteriores de Colombia y la Embajada de Venezuela.
El gobernador Édgar Díaz, la clase dirigente y los gremios regionales reiterarán a los presidentes Santos y Chávez que la verdadera integración colombo-venezolana renazca en esta área fronteriza.
Las relaciones políticas y comerciales entre los dos países se rompieron en el gobierno de Álvaro Uribe con efectos negativos para la economía de Norte de Santander. Desde entonces, la deuda con los productores locales ha perjudicado al departamento.
La llegada de Santos al poder supuso el mejoramiento de las condiciones económicas. Aunque se ha avanzado, hay renglones en los que persiste el déficit en detrimento de los colombianos.
Los industriales del calzado, la cerámica, la caña de azúcar, los textiles y las manufacturas, entre otros, han tenido que buscar mercados más allá de la línea fronteriza por la posición chavista de no negociar.
Decenas de fábricas en Ureña y San Antonio del Táchira cerraron las puertas por no tener cómo sostener la mano de obra colombiana. Los despidos generaron desempleo en los municipios fronterizos.
En Cúcuta el rompimiento de relaciones se siente en las calles, en los almacenes y en los talleres. La escasa presencia de venezolanos y el bajo poder adquisitivo del bolívar dieron al traste con la actividad comercial.
El encuentro Santos-Chávez se toma como el renacimiento del intercambio entre dos pueblos que soportan las decisiones que se toman en Bogotá y Caracas.