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CÚCUTA.- Al frente de la Universidad Abierta y a Distancia, en Cúcuta, está una mujer que ama lo que hace. Ama ser mamá, ama ser esposa, ama ser docente y trabaja con pasión. Un día, una amiga, con la que compartían tiempo y espacio como instructoras en el Sena, le habló de la oportunidad que había para ser docente en la UNAD.
Bastó ese dato para despertarle la inquietud investigadora. Identificó la convocatoria y se inscribió. Pasó las pruebas. Y como ocurre en la vida de los humanos, fue amor a primera vista. Ocurrió hace dos años y medio.
Yuleima Torres Romano, antes de vincularse a la Universidad, ejercía como directora ejecutiva de Corpoindustrial, la corporación de los industriales de Cúcuta. Desde su cargo, se impuso como meta visibilizar la entidad, que había cumplido 32 años como gremio. A pesar de ese recorrido, poco se conocía en el ámbito local.
- Cuando llegué, teníamos 11 empresas afiliadas, entre esas las más grandes y representativas de la ciudad. Al finalizar (la gestión) la dejamos con 40 empresas y ahora ha crecido enormemente.
Los afiliados trabajan por promover mejores prácticas en la industria y por posicionarse y tener más participación en las decisiones públicas que beneficien a la capital de Norte de Santander. De los industriales le queda la imagen que siempre requieren información clara, rápida y veraz para la toma de decisiones.
Había la responsabilidad del cumplimiento de metas y de diseño de acciones para alcanzar los objetivos previstos.
¿Por qué la dejó?
- Porque se me presentó este interesante reto de ser directora, estaba como docente. Nunca he dejado de ser docente, a pesar de las otras actividades ejecutadas. Este es un reto maravilloso.
El aceptar la nueva oficina, en medio del ambiente académico y sentirse junto a los colegas, la mantiene contenta. Esa alegría la demuestra al hablar y al dirigirse a los profesores. Así como los respeta, se hace ganar el aprecio y cuando tiene que ser enérgica no lo duda, se pone seria.
Tiene en mente proyectos y metas que quiere sacar adelante en la Universidad. El proceso que adelanta con estudiantes y docentes es educativo, es de formación a corto y mediano plazos.
La UNAD es una empresa, en la que aplica los conocimientos adquiridos al lado de líderes y empresarios, de los que aprendió la manera de alinear a los demás para hacer realidad las ideas; también, el trabajo en equipo y el liderazgo transformador.
- Esos aprendizajes me han servido mucho para el rol en el que estoy ahora, porque hemos conseguido y estructurado un equipo maravilloso. Nos gusta venir y nos gusta trabajar acá.
Los hombres, tanto en la Corporación como en la Universidad, han sido respetuosos. Los límites están claros y no dan pie para malas interpretaciones. Agradece a Dios, porque la ha ayudado a salir adelante.
Al regresar a casa, luego de las extenuantes jornadas laborales, toma el papel de madre y le entrega el amor a Jeremías, de 12 años. Trata de generar espacios para compartir juntos. Le encanta ser mamá, acompañar al hijo, guiarlo, formarlo, darle libertad. La maternidad la combina entre la rigurosidad y la comprensión. Así, han construido una relación bonita.
Yuleima Torres es cucuteña. La infancia la repartió entre Pamplona, junto a la familia paterna, y Cúcuta. Las vacaciones las disfrutaba en la Plazoleta Almeida, donde aprendió a montar en patines y en bicicleta. Ahí , disfrutó las papas fritas en bolsa de papel.
Creció en el barrio Capillana y estudió en el colegio Carmen Teresiano. El Colegio Mayor del Rosario la tituló en fisioterapia y posgrado en gerencia del talento humano y desarrollo organizacional. Cursa la maestría en gobierno, políticas públicas y territorio, en la UNAD.
- Siempre he dicho que el ser humano tiene múltiples inteligencias y es capaz de cumplir múltiples oficios. Lo que pasa es que esta parte del mundo no ha permitido que exploten todas las inteligencias y las capacidades.
Entre los gustos hay un lugar reservado para los asuntos de lo público. Ha estado vinculada en la Gobernación de Norte de Santander en el desarrollo de políticas públicas. Lideró la cuestión relacionada con población desplazada como fenómeno nuevo. Está convencida de que de esa manera se consiguen mayores beneficios para la comunidad.
¿Eso significa que tiene aspiraciones políticas?
- Por ahora no. Nunca he estado en un partido ni nada de eso. Me gusta la parte pública. Soy respetuosísima y admiro profundamente a aquellos que trabajan en la parte pública, porque hacen un gran esfuerzo y sacrificios.
El enamoramiento que tiene por la UNAD la lleva a expresar con firmeza que esta es una empresa en la que quiere seguir y a la que califica como su “proyecto de vida maravilloso”.
RAFAEL ANTONIO PABÓN
