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CÚCUTA.- A diario, decenas de carretas circulan por las calles céntricas de la ciudad y al paso dejan una estela de ruido ensordecedor. Los vendedores ofrecen cualquier cantidad de mercancía a grito entero, estacionan en las esquinas y ocasionan contaminación auditiva.
Mediante el Decreto 0287, emanado de la Alcaldía, queda prohibido el porte y uso de megáfonos, altoparlantes y amplificadores por parte de comerciantes formales e informales y carreteros en zonas de espacio público.
La administración municipal busca controlar, regular y promover espacios en los que los cucuteños se sientan cómodos y alejados del ruido. Además, se pretende eliminar los focos que interrumpen la tranquilidad y generan alteraciones en sitios no permitidos.
En el pasado reciente, los carreteros anunciaban los productos y mientras atendían a los clientes había un silencio momentáneo. De un tiempo para acá, utilizan grabaciones que no cesan de contaminar el ambiente cucuteño, especialmente en el polígono comprendido entre las calles 0 y 15 y las avenidas 0 y 12.
Al anunciar el precio de frutas o verduras la voz pregunta: “¿por qué tan barato?” y responde: “Por qué la finca es mía” o “porque la bajé con un garabato” o “porque la finca es de mi tío Eladio”.
El propósito del Decreto es frenar a los bulliciosos, callar el ruido y acabar con el desorden originado con megáfonos y otros aparatos. A los vendedores ambulantes se suman los equipos y altoparlantes que instalan en andenes los propietarios de almacenes. Música a todo volumen más la voz del anunciador contaminan el ambiente en el centro de la ciudad.
“Pareciera que es una competencia por medir quién grita más fuerte. Esta medida nos da facultades para incautar esos aparatos”, dijo Miguel Castellanos, secretario de Gobierno Municipal. Durante una semana, la medida será de carácter preventivo y pedagógico.
