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CÚCUTA.- Al repasar las páginas del tiempo encontró que quedó huérfano a los 8 años y que el conflicto lo desplazó cuando apenas tenía 15 años. Luego, el Ejército lo reclutó para sus filas y vistió el uniforme 6 años. Al retirarse de la institución se capacitó en seguridad y escolta, y trabajó en diferentes áreas. Después, hizo de todito: construcción, minas de carbón, vendedor ambulante y zapatero.
El mismo reloj biológico fue llevándolo hasta donde no se imaginó que encontraría el proyecto de vida. Desde la natal Curumaní (Cesar), Melfides Gulloso se trasladó a Villa del Rosario (Norte de Santander). La distancia en línea recta hasta Cúcuta es de 184,57 kilómetros, pero la distancia en ruta es de 357 kilómetros (Wikipedia).
En el municipio histórico tropezó con la fundación Artes Empíricas y de ahí en adelante cambió el rumbo de los pasos. Las noches de insomnio en la selva, los momentos aciagos mientras cuidaba la espalda del jefe, las mañanas soleadas en las obras y las angustias por atender clientes terminaban. Seguían jornadas de reflexión, concentración, repaso de vivencias y escritura.
- Participo con cinco poesías en mi primera obra literaria, Entre plumas y espadas. Ahí veo la luz al final del túnel en el mundo literario.
Tomó ese camino de la literatura y se dejó conducir por aquello que guardaba con celo en el interior. Deseaba publicar sus poemas y no lo había hecho por diversas circunstancias. Ahora, tiene en su haber tres obras y otras tantas rondando la cabeza.
El recuento de lo vivido sirvió de base para alcanzar el punto máximo de inspiración y componer esos versos que unidos y sonoros le cantan a la realidad. Lo bueno lo plasma y lo malo lo recicla con palabras precisas para convertirlo en música. Es el resultado de la reflexión filosófica y literaria, a manera de resumen de 42 años de existencia.
Para alcanzar otro reto propuesto, complementario a este desarrollo artístico, validó el bachillerato y el siguiente paso será matricularse en la universidad para optar por el título de licenciado en literatura.
- Soy amante de la literatura y la filosofía, pero quiero reforzar mi carrera como escritor. Aunque, el poeta o el escritor no se hacen en la universidad.
Las obras están compuestas en verso y lírica, con lenguaje y vocabulario inusuales al que se maneja en la cotidianidad. La facilidad de expresión es la virtud con la que nació y en el curso de la vida la ha desarrollado, complementándola con la lectura. Ahí ha adquirido facultades para hacer poesía, según su concepto. La esencia la trae desde el vientre.
El mugir de mi silencio, segunda obra. Nombre que pensó mientras recorría las montañas para garantizarles la paz a los colombianos. Lo adoptó y no permitió que lo abandonara a pesar de las adversidades de la guerra. Tampoco el silencio nocturno lo envió al olvido. Años después, sin el camuflado encima, lo liberó. Es solo poesía.
Bajo sangre y fuego, quizás la consentida. Es una obra literaria narrativa no ficción y cuenta la verdad. Es la historia de cinco hermanos militares que tienen la osadía de cuestionar a la muerte. Nunca la eludieron. La tuvieron a centímetros y no la evadieron. Todo lo contrario, iban en su búsqueda, porque lo último que creían que ocurriría sería que saldrían con vida de esa maraña selvática en la que pasaban los días.
- Por fortuna, lograron salir vivos y el escritor (yo) plasma la vivencia de un soldado. Cómo se incorpora al Ejército, cómo vivió su vida como desplazado y huérfano, cómo logra salir vivo para decir ‘aquí estoy para contar’.
La ilusión es llevar esta obra a la pantalla gigante, que llegue a las salas de cine, que los colombianos conozcan la historia. Para la filmación tiene como referente la película Salvar al soldado Ryan, dirigida por Steven Spielberg, con Ryan Hurst y Tom Hanks. Bajo sangre y fuego es la historia real contada por cinco militares que sobrevivieron a la guerra.
Cuarta obra. Bajo sangre y fuego, el mundo que nadie espera. Hay otras tres obras de poesía, una novela a la que le busca el título y la película La memoria de un soldado y sus demonios.
- Estamos en el curso de mirar que obra publicamos en este año. Dependiendo de los recursos económicos que podamos encontrar.
Hoy, Melfides Gulloso es otro ser humano. No está acosado por las órdenes de los superiores ni tiene que cumplir horarios de trabajo. Es libre y así piensa. Cuando no poesía ayuda a niños a tomar el camino de la literatura, de la declamación, de la escritura. Solo necesita el impulso definitivo que lo catapulte al infinito intelectual.
RAFAEL ANTONIO PABÓN
