CÚCUTA.- La reactivación de la Mesa de Interlocución y Acuerdo Catatumbo (MIA–C) permitió reafirmar los compromisos adquiridos con la población campesina. Voceros de la Asociación de Campesinos del Catatumbo (Ascamcat), del Gobierno y de la administración departamental trabajaron durante tres días para retomar lo expuesto en el paro del 2013.
Los garantes ratificaron que deben definirse temas puntuales para beneficio de El Catatumbo. Aunque los encuentros estuvieron suspendidos por 8 meses, este espacio de tiempo sirvió para afianzar el proceso de paz.
El viceministro de Desarrollo Rural, Juan Pablo Díaz-Granados, dijo que repasamos temas anteriores, entre los que destacan:
1.- El Anillo Vial de la paz
2.- Proyectos productivos
3.- Avances y diseños de acueductos veredales, con Fonade”, señaló el Viceministro.
El voceros de la MIA-C, César Jerez, agregó que hay acuerdos de asistencia técnica en infraestructura vial y en acueductos y alcantarillados. “Esperamos las respectivas inversiones para 2018”. El lunar es que el Gobierno no acogió la propuesta del plan de implementación de acuerdos de paz, como por ejemplo iniciar el banco de tierras, la titulación de fincas, la zonificación ambiental, Catastro y la Zona de Reserva Campesina. “Esta fue una propuesta integral que firmó también la Gobernación”.
En el análisis, Jerez solo resaltó acuerdos parciales en sustitución de cultivos ilícitos y de programas de desarrollo con enfoque territorial. Los otros temas serán abordados en la próxima sesión. Se espera que los otros puntos avancen en una reunión que se haga en enero en Tibú. “El gobernador (William Villamizar) ha asumido una postura positiva y esperemos que en la próxima sesión tengamos avance”.
El secretario de Gobierno, Edgar Pallares, recalcó que el papel de la administración departamental fue resaltado por el Gobierno, al convertirse en articuladora entre la oferta institucional y las necesidades de las comunidades.
En infraestructura, se hará la red terciaria en 290 kilómetros, con el uso del banco de maquinaria. “Seguiremos con inversiones y estrategias que son necesarias para la gente”, dijo Pallares.
Además, se mantiene el enfoque de la sustitución voluntaria de cultivos ilícitos, que le apunta al desarrollo de un proyecto piloto en Caño Indio (Tibú) y dos acuerdos municipales en San Calixto y Sardinata.
La próxima sesión de la MIA-C será en Tibú, en enero, con presencia de autoridades locales, departamentales y nacionales, y voceros de la población. Será una nueva oportunidad para presentar las propuestas campesinas para beneficio a la comunidad.