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TIBÚ.- Hemos hecho una visita a Tibú. Es lamentable el estado de la carretera (117 Kilómetros) desde Cúcuta y, en especial, desde Astilleros en adelante. La velocidad de un vehículo normal es de 35 K/H. Los puentes, tan importantes sobre los ríos Sardinata y Tibú, son obsoletos, no permiten el paso sino de un solo carro y peligroso su cruce.
El estado de la mayor parte de las fincas se observa en todo el recorrido. Desde la Silla en adelante, no hay organización en las ganaderías ni en la agricultura. Se ve una calidad de vida baja para la gente.
Es asombroso que en esta carretera aún estén los mismos puentes que construyó la Compañía Colombia Petroleum, hace 50 y 60 años, los cuales son obsoletos y solo permiten el paso de un vehículo.
Hay más de 30 de estos puentes que oscilan entre 8 y 25 metros de longitud. Es urgente que Invías haga un programa de sustitución de puentes por los de doble carril, seguros y que garanticen el tránsito normal.
Esta sustitución de puentes, por su tamaño, no cuesta más de $ 25.000 millones, cifra pequeña para una región rica en recursos y que necesita urgente atención de los gobiernos nacional y departamental.
Respecto a Tibú, en el casco urbano se ve deterioro, congestión, malos servicios públicos, calles en mal estado, no hay servicio de gas residencial y alto desempleo.
Respecto de la vía Tibú- Convención la situación es peor. Norte de Santander no puede seguir siendo tratado y administrado por las mismas autoridades y líderes regionales, ni por el gobierno nacional en la forma como lo hacen, con desprecio, con indiferencia, sin importarles la comunidad y permitiendo un territorio a la deriva, sufriendo sus gentes, en especial los niños, un futuro de incertidumbre y falto de oportunidades. Ese no es el departamento que deseamos seguir teniendo.
SEGUNDO ANTONIO GONZALEZ
