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PAMPLONA – Norte de Santander.- Hasta mediados de abril, hubo médico forense en la Unidad Básica de Medicina Legal y Ciencias Forenses de Pamplona (Norte de Santander) y el Distrito Judicial. En alguna época la Unidad contó con tres facultativos y por más de 30 años hubo uno de tiempo completo. El último se pensionó este 15 de abril. Esto significa que existe presupuesto y la justificación de la permanencia en esta plaza.
Los veedores Prosalud Pamplona, ante la ausencia del forense, solicitaron a la Fiscal General de la Nación, Luz Adriana Camargo, la asignación del médico de tiempo completo para la Unidad Básica de Medicina Legal, que funciona desde 1991.
Ciento cincuenta mil habitantes pertenecen a la zona de cobertura, compuesta por Pamplona, Pamplonita, Bochalema, Chinácota, Ragonvalia, Herrán, Mutiscua, Silos, Cucutilla, Chitagá, Cácota, Labateca y Toledo.
Entre los principales servicios forenses de la Unidad, durante tres décadas, destacan:
- Patología Forense. Efectúa necropsias que garantizan ante la justicia las evidencias y la debida cadena de custodia.
- Clínica Forense. Adelanta abordaje de víctimas no fatales de violencia interpersonal, delitos sexuales, violencia intrafamiliar, maltrato conyugal, violencia en adulto mayor, maltrato a menores, víctimas de accidentes de tránsito y estados de embriaguez.
Pamplona, históricamente, ha sido Distrito Judicial Especial, condición que se mantiene, y la Unidad Básica de Medicina Legal ha sido apoyo indispensable. Funciona dentro del hospital San Juan de Dios, en modalidad de comodato, no cuenta con espacios propios ni la infraestructura técnica adecuada para prestar servicios.
Ante esta última circunstancia, los veedores piden a la fiscal Camargo el fortalecimiento de la infraestructura para que la Unidad Básica tenga espacios de funcionamiento. A pesar de que la Alcaldía de Pamplona donó un lote de 1033.62 metros cuadrados, el Instituto Nacional de Medicina Legal no lo ha recibido formalmente.
“No resulta entendible, por los argumentos expuestos con anterioridad, que en lugar que el Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses consolide y fortalezca la prestación de sus servicios en el Distrito Judicial de Pamplona, a través de la existente Unidad Básica, adopte medidas que van en detrimento de dichos aspectos y, por lo tanto, de la comunidad de esta región del departamento de Norte de Santander”, escribieron los veedores a la Fiscal General.
Otros hechos denunciados son:
– Se ha limitado el servicio de la Unidad Básica a dos días a la semana, entre la 1:00 de la tarde y las 7:00 de la noche.
– Las necropsias atendidas requieren inmediata reacción, dado que no se cuenta con la logística de mantenimiento de cadáveres (neveras) y el desplazamiento a Cúcuta representa alto gasto económico y largas esperas para la atención.
– La Unidad Básica ha apoyado casos de Cúcuta que no requieren desplazamiento del forense, pero ayudan en la descongestión de la capital de Norte de Santander.
Entre las organizaciones solicitantes destacan veeduría Prosalud Pamplona, Asociación de Usuarios del Hospital San Juan de Dios de Pamplona y comunidad.
