CÚCUTA.- En Norte de Santander solo un municipio fue escogido como zona especial para la ubicación de los guerrilleros de las Farc que dejan las armas. Tibú será la localidad que en el departamento servirá como ‘zona veredal transitoria de normalización’, al igual que otras 22 en el país.
Tibú vio luz municipal el 25 de noviembre de 1977. Entre los fundadores aparece Alfonso Merchán Pérez, presidente del comité pro-municipio de Tibú. El Catatumbo, por mucho tiempo, fue considerado como zona peligrosa y sobre la región se tejieron historias surgidas de la realidad o producto de la imaginación de los auotres.
La densa selva, las tormentas eléctricas, los indios motilones, los animales salvajes y los caudalosos ríos no faltaban en las conversaciones. El petróleo, también, aparecía en los relatos, al lado de los colonos, los exploradores petroleros, los misioneros y los extranjeros que pisaron esa tierra.
Solo 15 minutos por carretera separan a Tibú de Venezuela y 125 kilómetros de Cúcuta, que se recorren en 3 horas en autobús. La naturaleza le regaló los ríos Catatumbo, San Miguel, Socuavo Norte, Chiquito, Sardinata, Nuevo Presidente, Tibú, Socuavo Sur y Río de Oro.
El municipio limita, por el Norte, con Venezuela; por el Sur, con Cúcuta, El Zulia y Sardinata; por el Oriente, de nuevo con Venezuela, y por el Occidente, con Hacarí, San Calixto, El Tarra y Teorama. La temperatura promedio es de 27 grados centígrados, a la sombra.
Los tibuyanos cultivan cacao, yuca, arroz y plátano. Tienen en la ganadería una de las principales fuentes de trabajo, aunque en los últimos años se ha disminuido en más del 80 por ciento. La pesca artesanal sirve para el consumo doméstico.
De acuerdo con el documento del final del conflicto armado en Colombia, Las Farc se ubicarán en 23 ‘zonas veredales transitorias de normalización’. En esos lugares se mantendrá la institucionalidad y en 8 pequeños puntos transitorios de normalización. El movimiento hacia estas zonas contará con todas las medidas de seguridad por parte de la Fuerza Pública y el Mecanismo hará el monitoreo y la verificación.
La diferencia entre una zona y un punto será la cantidad de guerrilleros que estarán ubicados, el tamaño y la ubicación. Los puntos fueron concebidos para la llegada de los frentes que se encuentran en zonas remotas y serán pequeños campamentos.
Los lugares de ubicación fueron diseñados para hacer el tránsito de los guerrilleros a la legalidad y la dejación de las armas. Se conformarán al finalizar el proceso de conversaciones. Las Farc adelantarán la dejación de las armas y preparan su proceso de reintegración.
Estas zonas facilitarán la labor del mecanismo de monitoreo y verificación en cabeza de la ONU.
Estas son las zonas veredales anunciadas:
Cesar: La Paz; Norte de Santander: Tibú; Antioquia: Remedios, Ituango, Dabeiba; Tolima: Planadas, Villarica; Cauca: Buenos Aires, Caldono; Nariño: Policarpa, Tumaco; Putumayo: Puerto Asis; Caquetá: Montañita, Cartagena del Chairá; Arauca: Arauquita, Tame; Meta: Macarena, Mapiripán, Mesetas, Vistahermosa; Vichada: Cumaribo; Guaviare: San José del Guaviare (este), San José del Guaviare (oeste).
Los ocho campamentos son los siguientes:
La Guajira: Fonseca; Antioquia: Vigía del Fuerte; Chocó: Riosucio; Córdoba: Tierralta; Cauca: Corinto; Caquetá: San Vicente; Meta: Losada y Macarena; Guainía: Puerto Colombia.
¿Cómo funcionarán estas zonas?
Se acordaron unas reglas de comportamiento que deberán ser acatadas por todos su hombres y que serán verificadas por el Mecanismo en cabeza de la ONU. Las zonas tendrán una logística para atender las necesidades básicas y unos dispositivos de seguridad.
Dentro de las zonas las órdenes de captura estarán temporalmente suspendidas. Quienes en cumplimiento de las tareas relacionadas con el acuerdo de paz deban salir de este espacio, serán monitoreados por el Mecanismo bajo un esquema de seguridad a cargo del Gobierno y en ningún caso podrán portar armas ni uniformes.
Adicionalmente delitos comunes que puedan cometerse dentro de las zonas, como por ejemplo, hurto y homicidios, serán atendidos por las autoridades competentes.
¿Quién garantizará la seguridad de la comunidad en las zonas donde se ubiquen las Farc?
Se trata de paz con seguridad. La Fuerza Pública en cumplimiento de sus deberes constitucionales continuará protegiendo los derechos y libertades de todos los ciudadanos.
Para estas zonas en particular, se implementarán dispositivos especiales y robustos por parte de la Fuerza Pública.
Foto: Archivo www.contraluzcucuta.co