Las normas entraron en vigencia el 1 de julio y hacen parte de la cotidianidad del juego.
- Regla ‘anti Dibu’. No permite a los arqueros provocar al rival que vaya a patear un penalti, haciendo gestos que distraigan.
- Invasión en las celebraciones. Si después de anotarse un gol y antes de reanudarse el juego el árbitro constata que una persona no autorizada se hallaba en el terreno de juego en el momento de marcarse el gol, y esa persona interfería en el juego, deberá anular el gol si la persona no autorizada era jugador, suplente, sustituido, expulsado o miembro del cuerpo técnico del equipo que marcó el gol.
- Nuevo árbitro. Habrá un árbitro asistente de reserva, además de remplazar a cualquiera de los titulares.
- Tiempo añadido. Se añadirán minutos al final del encuentro por celebraciones y tiempo perdido.
- Las amarillas. Las advertencias y amonestaciones impuestas a jugadores y miembros del cuerpo técnico durante el encuentro no se tendrán en consideración en la tanda de penales.
- Las expulsiones. El árbitro solo expulsará a un jugador que comete una infracción, por ejemplo, un penalti, si evita una ocasión manifiesta de gol si comete dicha infracción sin tener posibilidad de jugar el balón. En caso contrario, no será roja.
- La regla Mbappé por el fuera de juego. La Fifa pretende con esta norma aclarar situaciones como la que se dio en la final de la Nations League entre España y Francia cuando Mbappé se benefició de una acción para decidir el encuentro.
- El nuevo rol del entrenador. En el caso que suceda una acción ilegal dentro de un banquillo y no se logre identificar al culpable de los hechos, el entrenador será el que reciba el castigo