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CÚCUTA.- Luis Eduardo Suárez está sentado sobre la matera de uno de los árboles que abundan en Cúcuta. Quizás descansa luego del recorrido por las calles con el mercado que acaba de comprar en la tienda cercana. O, quizás, piensa en la siguiente investigación que hará sobre cualquier asunto de Norte de Santander y que luego convertirá en libro, con característica de cartilla.
‘El Flaco’, le dicen los que lo tienen por amigo, no quiere que lo reconozcan como historiador y se autodefine como ‘recopilador y promotor cultural’. Así se siente cómodo. Esos calificativos le han valido para escribir diversas obras, entre las que destacan Historia de la Casa de la Cultura de Cúcuta, Homenaje a la madre nortesantandereana, El himno de Cúcuta y sus autores y Las Brisas del Pamplonita y sus autores.
Nació, en 1957, en Tibú, y trabajó a lo largo de 35 años para el gobierno departamental, en el área cultural. Ahora, se metió en la aventura de escribir acerca de la biblioteca Julio Pérez Ferrero y sobre Bochalema. Obras que “pagó el autor con su dinero”, porque no consiguió quién lo patrocinara.
“Hago esta obra con mucho rigor apegado a la disciplina histórica en el manejo de las fuentes”, escribió en la presentación de Crónica de una biblioteca centenaria, dedicada a la Julio Pérez ferrero, donde no consiguió apoyo económico para imprimir los ‘cuadernillos’.
Patrimonio humano y cultural de Bochalema está dedicado “a los niños, adolescentes, maestros y a quienes visitan el municipio y quieren saber un poco de su patrimonio”, escribió en la presentación.
Luis Eduardo Suárez, ahora, con las obras en la mano, quiere un espacio para mostrarlas y, de pronto, venderlas en la Feria del Libro de Cúcuta, a la que llegan escritores que han corrido con suerte y les han pagado las publicaciones.
