CÚCUTA.- Por las calles de diferentes municipios de Norte de Santander es frecuente ver casetas de madera repletas de pimpinas (envases plásticos), donde se detienen conductores colombianos para llenar de gasolina los tanques de vehículos y motocicletas.
Esta escena se ve frecuentemente en Ocaña, Cúcuta y Ábrego, mientras que las pocas estaciones de servicio legales están casi vacías. Es la dura situación por la cual pasa la mayoría de empresas, que se han visto obligadas a cerrar las puertas a causa del contrabando, en este caso, de combustible, que se ha convertido en negocio próspero para unos pocos.
Este negocio ilícito les deja a los llamados ‘pimpineros’ una ganancia de hasta 4000 por ciento, por la diferencia en los precios entre los dos países. Pero el riesgo, es igualmente alto.
Todos, a legalizarse
Dada la realidad, varias alcaldías de Norte de Santander firmaron convenios con Sena para la capacitación de los ‘pimpineros’ para que desarrollen competencias y se dediquen a oficios legales, y estimulándolos para que pongan en marcha proyectos productivos -como parte del proceso de formación en la entidad- del cual puedan derivar el sustento. Es apoyarlos para que pasen de lo ilegal a lo permitido.
La Unidad de Emprendimiento del Sena, en esa región del país, ha acompañado a más de 400 expendedores ilegales de combustible en la formulación de los planes de negocios, dentro del programa ‘Socio Reconversión Laboral’.
“Estamos trabajando activamente en el programa y creemos que va a dar los frutos esperados, pues se desarrolla con personas involucradas en el comercio ilegal de combustible, y sabemos que nos va a abrir la mente a otras posibilidades”, dijo Carmen Nelly Mora, vicepresidenta de Cooperativa Multiactiva de Pimpineros de Norte de Santander.
La tarea del Sena consiste, inicialmente, en sensibilizar a los vendedores en emprendimiento, que les permitirá desarrollar planes para la puesta en marcha de negocios o fortalecer la unidad productiva que tengan.
Liliana Noriega, directora de la Fundación Fundescat en Norte de Santander, dijo que “el año pasado trabajamos con alrededor de 90 expendedores. Este año iniciamos el trabajo con 55 en Ocaña, 45 en Ábrego y 14 en Cúcuta. Todos bajo la orientación del Sena”.
Pedro Cacua, líder de Emprendimiento del Sena, en el departamento, afirmó que “son más de 400 personas las que se beneficiarán con este proceso aunque, muchas veces, el problema radica en que desean seguir con este negocio ilícito, que es prácticamente heredado, pues es rentable”.
Este proyecto es liderado por el Ministerio de Minas y Energía con apoyo del Sena, Gobernación, alcaldías y Fundescat.
Combustible en Cifras
En el 2011, el Ministerio del Poder Popular de Petróleo y Minería, por intermedio de la Dirección General de Mercado Interno y PDVSA (Venezuela), despachó a Norte de Santander 105’458.678 litros de combustible. 54’401.539 litros de diesel y 51’857.139 litros de gasolina, al reanudarse las relaciones entre los dos países.
Ecopetrol, en el informe mensual de precios al consumidor del combustible importado desde Venezuela para las zonas de frontera (2012), afirmó que los costos del galón de gasolina en Cúcuta disminuyeron en $70, al pasar de $4.106,69 en febrero a $4.036,19 en marzo.
La disminución que beneficia a los conductores nortesantandereanos ha hecho que se reevalúe la preferencia por llenar el tanque del carro con los ‘pimpineros’.
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